La clave del éxito

Quizás afirmar que puedo entregar la clave del éxito pueda parecer pretensioso… de hecho, sí lo es, bastante… bueno, tómenlo como una forma interesante de titular un artículo que en realidad se trata de un tema que ojalá pueda interesar a varios: ¿alguna vez se han preguntado sobre qué escribir en sus blogs? ¿alguna vez han sentido que se han quedado sin tema y que no pueden volver a tomar el hilo? Bueno, este artículo se trata justamente de eso: un consejo para darnos cuenta de que es imposible quedarse sin tema. Tómenlo como un consejo: si les hace sentido, bien, si no… será, qué le vamos a hacer. Y si tienen una idea mejor, por supuesto, podemos discutirla en los comentarios, que para eso están 🙂

El consejo es simple: escribe de lo que sabes, aunque en verdad ni siquiera es necesario saber algo para poder escribir sobre eso, ya que también podemos escribir sobre nuestras dudas o transformar a éstas en un punto de partida para investigar sobre un tema. Podría decir, aun mejor, escribe de lo que haces, ya que cualquiera está metido en algo de lo que sabe un poco. Sí, como Squidoo, pero en un blog tienes más libertad para desarrollar un tema a tus anchas y tiene la posibilidad de tener más interacción con quienes lo visitan y leen.

¿Y qué pasa si no estás haciendo nada interesante?Me costaría creer que no hay nada interesante sobre lo que alguien pudiera escribir… no es buena idea tratar de llegar a millones de personas en un par de semanas ni pensar que pudiera existir algo que en verdad pudiera interesar a todos: si te preocupa que exista gente que pueda leer lo que escribes, mantente enfocado, pues a veces un sitio dedicado a un público que en principio es pequeño (digamos por ejemplo, un tema muy específico) puede convertirse en lugar de referencia para un gran porcentaje de personas en ese público, mientras que sitios dedicados a temas más generales a veces sólo capturan porcentajes muy pequeños de audiencias enormes (por supuesto, éstas no son “leyes” que se vayan a cumplir siempre, sino solo especulaciones).

Bueno, y si en verdad no crees que tengas algún tema interesante: inventa algo. Suena más difícil de lo que en verdad es. Y escribe sobre el proceso, seguro que alguien podrá aprender algo de tu experiencia.

En fin… documenta tu vida: lo que piensas, lo que aprendes, lo que haces, lo que anhelas. Tu mayor fuente de inspiración puede ser tu propia experiencia, y (créaslo o no) siempre puede haber otros que puedan aprender con ella.